La eficacia de la descontaminación parece optimizarse mediante la aplicación de un detergente después del decapado, un vaciado seguido de un lavado de las pre-fosas, la técnica de doble desinfección por termonebulización o mediante espuma y, finalmente, el secado de las salas tras la desinfección. Por otra parte, la instauración de un remojo automatizado, la aplicación del detergente antes del lavado y la aplicación del desinfectante en espuma se mostraron como técnicas interesantes a nivel económico.
I. Corrégé. Protocole de nettoyage-désinfection et méthodes de contrôles. Techni-Porc. 2006. Vol. 29 (1).